El Centro Médico de la Universidad de Wexner y la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal de Ohio (Estados Unidos) han publicado conjuntamente un estudio en la revista 'JAMA Pediatrics' donde se expone que aquellos adolescentes que sufren trastornos en su estado de ánimo y que, además, son consumidores de cannabis, el riesgo que tienen de autolesión, muerte por todas las causas y muerte por sobredosis no intencional es mucho mayor al compararlos con el resto de los jóvenes.

 

La profesora asociada en el departamento de psiquiatría y salud conductual de la Universidad Estatal de Ohio y autora principal del estudio Cynthia Fontanella, relata como "el uso y la adicción a la marihuana es común entre los jóvenes y adultos jóvenes con trastornos del estado de ánimo, pero la asociación de este comportamiento con la autolesión, el suicidio y el riesgo de mortalidad general no se comprende bien en esta población que ya es vulnerable. Estos hallazgos deben considerarse, ya que los estados contemplan la legalización marihuana medicinal y recreativa, las cuales están asociadas con un mayor trastorno por consumo de cannabis".

 

Para llegar a estas conclusiones se revisaron los datos de reclamos de Medicaid de Ohio vinculados con los datos del certificado de defunción. El análisis incluyó a 204 jóvenes después de realizar un seguimiento a un total de 780 adolescentes (de 10 a 24 años) que habían sido diagnosticados con trastornos del estado de ánimo entre el 1 de julio de 2010 y el 31 de diciembre de 2017, a todos ellos se les dio un seguimiento de hasta un año desde el reclamo inicial hasta el final de la inscripción, el evento de autolesión o muerte.

 

En el estudio los investigadores se centraron en buscar a aquellos individuos que habían sido diagnosticados por un médico en algún trastorno derivado del consumo de cannabis. Se revisaron las autolesiones que se habían provocado los jóvenes, la mortalidad por todas las causas, las muertes por suicidio, la sobredosis involuntaria, los accidentes automovilísticos y el homicidio para así determinar qué asociaciones había entre el trastorno por consumo de cannabis y los resultados.

 

Los resultados revelaron que el trastorno por consumo de cannabis se registró en más del 10% (21.040) de los jóvenes con trastornos del estado de ánimo. Además, también fue asociado de forma significativa en aquellos de edad avanzada, el sexo masculino, la raza negra, los trastornos bipolares u "otros" trastornos del estado de ánimo, antecedentes de autolesiones y uso previo de servicios de salud mental, incluida la hospitalización psiquiátrica y las visitas al departamento de emergencias.

 

Fontanella señala que, "también encontramos que el trastorno por consumo de cannabis se asoció significativamente con la autolesión, incluida la muerte por sobredosis involuntaria y el homicidio. Desafortunadamente, aunque este estudio observacional llama la atención sobre estas asociaciones, no puede contribuir a nuestra comprensión de la causalidad o el mecanismo".

 

Aquellos adolescentes que sufrían una mayor gravedad en sus trastornos del estado de ánimo, no solo podrían estar más inclinados a consumir cannabis que los jóvenes menos gravemente afectados, sino que el consumo de cannabis también podrían empeorar los síntomas e interferir con el tratamiento eficaz de los trastornos del estado de ánimo.

 

Los jóvenes que consumen cannabis y sufren trastornos del estado de ánimo tienen mayor riesgo de muerte

 

Mary Fristad, profesora emérita en el departamento de psiquiatría y salud conductual de la Universidad del Estado de Ohio y directora de asuntos académicos y desarrollo de investigación en Nationwide Children's hospital Big Lots Behavioral Health Services explica que, "disminuir las tasas de consumo de cannabis y el trastorno por consumo de cannabis podría reducir el riesgo. Se ha demostrado que los modelos de terapia individual y familiar, incluida la terapia cognitivo-conductual y la terapia de mejora motivacional, disminuyen el consumo de cannabis en los jóvenes".

 

Ahora se espera que se pueda realizar a nivel nacional, por todo el territorio americano, un estudio que examine los riesgos de mortalidad en adolescentes y jóvenes más adultos que parezcan trastornos del estado de ánimo comórbidos y trastorno por consumo de cannabis pues los resultados que se pudieran obtener ayudarían en los ensayos de políticas y tratamientos. Al mismo tiempo los investigadores están planeando realizar una mayor exploración sobre el papel que desempeñan las leyes de marihuana en los resultados de salud mental de los jóvenes.