Las visitas a urgencias y las hospitalizaciones son más altas entre las personas que consumen cannabis, en concreto son un 22% más altas. Este nuevo dato lo ha obtenido el equipo de investigación de la Unity Health Toronto y el CIEM, en Canadá.

 

El estudio, publicado en el 'BMJ Open Respiratory Research', detalla que las lesiones físicas graves y las causas respiratorias eran las dos principales causas de visitas a urgencias y hospitalizaciones entre los consumidores de la droga.

 

Además, los datos obtenidos podrían indicar una asociación entre el consumo de cannabis y los problemas para la salud que su consumo representa. Para los investigadores, esta información habría que aprovecharla para educar y recordar al público, en general, los efectos dañinos del cannabis en nuestra salud. Cabe apuntar que el consumo de cannabis recreativo ha aumentado en Canadá desde la despenalización en octubre de 2018.

 

El doctor Nicholas Vozoris, autor principal y respirólogo en el St. Michael's, además de ser un científico asociado en el Instituto de Conocimiento Li Ka Shing del hospital, relata que, "nuestra investigación demuestra que el consumo de cannabis en la población general se asocia con un mayor riesgo de resultados negativos clínicamente graves, específicamente, la necesidad de presentarse en el servicio de urgencias o ser admitido en el hospital".

 

"A diferencia del tabaco, existe cierta incertidumbre o controversia respecto a los efectos adversos del cannabis sobre la salud. Algunas personas pueden percibir que el cannabis tiene algunos beneficios para la salud y que, por lo demás, es benigno. Nuestra investigación pone de manifiesto a quienes consumen -o se plantean consumir- cannabis, que este comportamiento se asocia a importantes acontecimientos negativos para la salud".

 

Los resultados que se obtuvieron entre los consumidores de cannabis se compararon con otros datos de personas que no son consumidoras de dicha droga, gracias a los datos administrativos de salud del ICES para los residentes de Ontario de entre 12 y 65 años de edad.

 

Con la utilización de la técnica de emparejamiento estadístico que aplicaron los investigadores durante el estudio, se pudo comparar los resultados de salud de casi 4.800 personas que declararon haber consumido cannabis en los 12 meses anteriores, con los resultados de salud de más de 10.000 personas que declararon no haber consumido nunca cannabis, o haber consumido cannabis solo una vez y hace más de 12 meses.

 

También se introdujeron 31 variantes diferentes en el momento de emparejar a las personas que participaban en el estudio para minimizar que la comparación fuera injusta, entre estas variantes se incluían, por ejemplo, datos demográficos, múltiples enfermedades físicas y mentales, y el consumo de tabaco, alcohol y drogas ilícitas.

 

La atención en urgencias y las hospitalizaciones es superior entre quienes consumen cannabis

 

El principal objetivo de la investigación era determinar si era posible la existencia de una relación entre el consumo de marihuana y las hospitalizaciones relacionadas con las vías respiratorias o las visitas al servicio de urgencias.

 

El estudio no encontró ninguna relación entre el consumo de cannabis y las visitas a los servicios de urgencias relacionadas con la respiración, las hospitalizaciones o las muertes. Así mismo, los investigadores se dieron cuenta de que los consumidores de cannabis tenían una mayor proporción de visitas al servicio de urgencias u hospitalizaciones por cualquier motivo.

 

Los datos también revelaron que aproximadamente uno de cada 25 consumidores de cannabis requerirá tratamiento en urgencias u hospital en el plazo de un año.

 

Los traumatismos agudos -definidos como lesiones corporales- fueron la razón más común por la que los consumidores recibieron atención médica o fueron hospitalizados, representando el 15% de los consumidores y el 14% de los consumidores recibió atención por problemas respiratorios.

 

El doctor Vozoris, también es científico del CIEM afirma que, "los resultados de nuestra investigación apoyan que los profesionales de la salud y el gobierno deberían desaconsejar el consumo recreativo de cannabis en la población general. Teniendo en cuenta el contexto de la despenalización del cannabis en Canadá, que muy probablemente ha facilitado la ampliación del consumo de este producto en la población, es necesario que nuestros dirigentes sanitarios y políticos realicen más esfuerzos para educar y recordar a los ciudadanos los efectos nocivos del cannabis en la salud".