Hay una relación entre la producción, el tráfico y el consumo de drogas y estos tres aspectos no para de crecer como se ha concluido en la reunión anual de la comisión de drogas de la ONU en Viena.

 

En la actualidad, varias instituciones y ONG, como la Comisión Global de Políticas de Drogas (GCDP) formado por expresidentes de gobierno y de la que formaba parte Kofi Annan, denuncian que las políticas recientes contra las drogas no funcionan. Las voces más críticas piden descriminalizar el consumo y posesión para uso personal, y pasar de la prohibición a una regulación gradual basada en la pruebas científicas y procesos participativos.

 

El enviado especial del secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) Michel Kazatchkine afirma que "hay más producción y consumo de drogas que nunca, debemos pasar de la prohibición a la regulación", este médico y diplomático francés considera "inaceptable" la prohibición actual de las drogas "la brecha entre la evidencia y las políticas ha matado a mucha gente".

  

En la reunión anual de la Comisión de Estupefacientes (CND) de la ONU continúan fraccionados entre los que apuestan por la penalización total y los que piden modificar el modelo hacia la descriminalización. El responsable de investigación y comunicación del Consorcio Internacional sobre Políticas de Drogas (IDPC) Marie Nougier comenta que "hay un enfrentamiento claro entre los gobiernos más y menos punitivos".

 

La conclusión de la sesión ministerial volvió a poner en relieve el respeto a la autonomía de los Estados para fomentar "una sociedad libre del uso indebido de drogas". Sin embargo, las ONG ponen de manifiesto que este objetivo es imposible.

 

El consumo de drogas se dispara

 

Hasta 275 millones de personas de entre 15 y 64 años (5,6 % de la población mundial) consumió drogas al menos una vez en 2016, según desprende el último informe que se conoció en julio de 2018 por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC). Ese mismo año, la producción mundial de cocaína y opio alcanzó cifras récord. En la actualidad el número de usuarios de marihuana sigue en aumento.

 

Aunque se pueda pensar que las drogas que son ilegales son las que causan más muertes, la droga que más mata es legal, en concreto los opiáceos, que se venden con receta médica, como analgésicos para tratar el dolor fueron la causa de tres de cada cuatro muertes por consumo de sustancias psicoactivas en el mundo, según datos del informe mundial sobre drogas 2018 de la UNODC. De 2016 a 2017, la producción global de opiáceos aumentó en un 65 % alcanzando las 10.500 toneladas, la estimación más alta registrada por UNODC.

 

También hay datos que reflejan que el aumento del consumo con fines no médicos se ha convertido en "una epidemia" en Estados Unidos, donde cada día fallece una persona por sobredosis de estas sustancias, y abunda en el mercado negro de países africanos y asiáticos.

 

Según el informe, "un creciente flujo de preparados farmacéuticos de origen incierto que está siendo destinado a uso no médico, así como el consumo y tráfico de polidrogas, está agregando niveles de complejidad sin precedentes al problema".